Estamos irritados, nerviosos, desmotivados y, a veces, hasta agresivos.
Tomar aire y respirar hondo, es todo lo que habíamos hecho hasta la fecha. Pero, ¿por qué esperar de mal humor cuando con un solo un gesto la vida mejora? Mostrar afecto puede ser el remedio más efectivo para combatir tus males. Está demostrado: dar o recibir un abrazo mejora tu salud emocional y física, eleva la serotonina, disminuye la presión arterial y fortalece el sistema inmunológico.
Lo que nos estamos perdiendo
Abrazar, ese pequeño gesto con coste cero, está pasando desapercibido… ¡y puede ser tu mejor arma para afrontar los problemas! ¿Quieres probar? Es sencillo: fija tu objetivo, ponte delante de él, abre tus brazos lo máximo posible, avanza hacía tu víctima y cierra los brazos rodeándole con todo tu amor.
Te contamos los beneficios de este gesto tan simple:
-Un abrazo es sinónimo de sentirse arropado. Genera seguridad y confianza.
Te contamos los beneficios de este gesto tan simple:
-Un abrazo es sinónimo de sentirse arropado. Genera seguridad y confianza.
-Consuelan en los momentos bajos, te ayuda a combatir la tristeza.
-Desarrolla la comunicación no verbal y la expresión emocional.
-Disminuye el estrés.
-Nos ayudan a conectar con los demás, a tener empatía.
-Son de gran ayuda para superar bloqueos físicos o emocionales.
-Dejamos de sentirnos solos para sentirnos sostenidos.
Pero además de los beneficios emocionales, el abrazo puede traer también mejoras en tu salud. Entre otros, eleva la serotonina ayudando a eliminar la depresión, disminuyen la presión arterial, hace que el sistema inmunológico se fortalezca. Incluso hay estudios que demuestran que las personas que abrazan o son abrazadas con regularidad se mantienen jóvenes más tiempo (estimulan el nivel de oxígeno en la sangre) y reducen el riesgo de padecer demencia.
¿Nos abrazamos?
Pero además de los beneficios emocionales, el abrazo puede traer también mejoras en tu salud. Entre otros, eleva la serotonina ayudando a eliminar la depresión, disminuyen la presión arterial, hace que el sistema inmunológico se fortalezca. Incluso hay estudios que demuestran que las personas que abrazan o son abrazadas con regularidad se mantienen jóvenes más tiempo (estimulan el nivel de oxígeno en la sangre) y reducen el riesgo de padecer demencia.
¿Nos abrazamos?
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