Sigueme en facebook

miércoles, 2 de abril de 2014

Pierde peso con cabeza (y salud)

Según la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el 76% de las mujeres españolas no están contentas con su peso, lo que supone que casi ocho de cada diez mujeres hace o hará dieta a lo largo de su vida. Las cifras se disparan con la llegada del buen tiempo. Nos entran las prisas.?
Los rayos del sol anuncian que es hora de quitarnos capas y mostrar nuestros encantos un poco más. Empieza la fiebre de las dietas y se dispara la alerta depeligro. Para hacer una dieta con salud existen tres normas básicas que no puedes pasar por alto: los productos y dietas milagro no existen, no hay una lista de alimentos prohibidos y nunca, bajo ningún concepto, debes apuntarte al peligroso tren de “me salto una comida”.

Pierde peso con cabeza (y con salud) en cosmopolitan.com.es


Cosmopolitan

Buscamos un equipo de expertos para que nos ayuden a encontrar esa dieta que verdaderamente funcione y que no pase factura a nuestra salud. Encontramos los de Clínica Opción Médica, y lo primero que advierten es que no existen las dietas milagros.  No solo eso, también nos advierten del conocido efecto rebote.
 
Para perder peso y mantenerlo a largo plazo lo único eficaz es seguir una alimentación variada y equilibrada acompañada de algo de actividad física. La Unidad de Obesidad de Clínica Opción Médica han elaborado una lista de reglas que debes conocer para perder peso con éxito, sin ponerte en riesgo:

No existen alimentos prohibidos. No debemos excluir ningún gran grupo alimenticio (hidratos, proteínas y grasas). La clave está en el equilibrio y la moderación.
 
- El objetivo de toda dieta de adelgazamiento es consumir menos de lo que el cuerpo gasta. Un especialista en nutrición podrá ayudarte a saber cuanta calorías consumes.

- La actividad física es fundamental para acelerar la pérdida de peso. Los ejercicios cardiovasculares como andar a paso rápido, salir en bici o correr son los más eficaces para eliminar el exceso de grasa. 

No a las calorías vacías. Una dieta de adelgazamiento no debe estar basada en la restricción, pero sí deben evitarse en la medida de lo posible aquellos alimentos que no tienen ningún valor nutricional y por lo tanto, no suponen ningún beneficio para nuestro organismo, como la bollería industrial, el alcohol, los refrescos azucarados... 

- ¿Hambre? ¡Jamás! La clave no está tanto en la cantidad, sino en la calidad de los alimentos. Hay que saber elegir y decantarse siempre por aquellos alimentos de bajo aporte calórico. 

- ¡Ojo con las bebidas! Muchas veces olvidamos que las bebidas también son una importante fuente de calorías. Modera al máximo el consumo de zumos de frutas, refrescos, bebidas alcohólicas, batidos, etc. Todo suma. 

- Picar entre horas está permitido. El número de ingestas diarias vendrá determinado por las necesidades individuales de cada uno. Si tu cuerpo te pide comer cada pocas horas, realiza comidas más pequeñas pero frecuentes incluyendo un tentempié a media mañana y uno por la tarde, por ejemplo. Recuerda que no debes pasar hambre. 

Aplica la ley de la compensación. Si te has pasado un poco en la comida, por ejemplo, trata de cenar más ligero para que ese desliz no afecte al total de calorías diarias. 

- No te saltes comidas. Lo único que conseguirás es llegar con un hambre feroz a la siguiente ingesta y arrasar con todo. Lograrás el efecto contrario al deseado. 

La constancia es la clave del éxito. Para obtener resultados, hay que ser perseverante. Solo la suma de muchos días bien hechos te acercará a tu objetivo final. Pero si un día fallamos lo mejor es hacer borrón y cuenta nueva. 

- Las prisas no son buenas. Dicen que lo que rápido se va, rápido vuelve y es cierto. Es mejor deshacerse de los kilos poco a poco, dejando al cuerpo adaptarse y hacerse a su nueva situación, para que la pérdida de peso sea estable y duradera. 

- Distingue hambre y ansiedad. Muchas veces comemos por ansiedad, por aburrimiento, para premiarnos, para pasar un mal trago... La comida es el alimento de nuestro cuerpo, no de nuestra alma y hay que desvincularla de los sentimientos

No hay comentarios:

Publicar un comentario